"Cuando en 1994 comencé a tomar fotos de rótulos y señalamientos, atraído por su desenfado y originalidad, el rotulismo era un arte en desuso que había sucumbido paulatinamente ante el uso de técnicas más modernas para publicitar los productos en muchos países, sobre todo los más desarrollados. La estandarización de los cánones del diseño detonados por la globalización del mercado y la cultura impusieron gráficos reconocibles en cualquier parte del mundo. Sensacional proponía volver la mirada a una gráfica que no por ser autóctona o popular, era menos efectiva que aquella que provenía de las escuelas de diseño y arte. Además de la presencia de los rótulos en comercios y calles, hay determinadas actividades como el cartelismo, impresiones publicitarias, novelas gráficas y empaques de productos que han desarrollado un lenguaje gráfico propio. Cuando vemos a simple vista un cartel, puede distinguirse por la tipografía utilizada, su color y su composición gráfica si se trata de un baile grupero, de una lucha o de un teatro de revista: hay un estilo. Sumado al ingenio de los propietarios y sus ideas de cómo comunicar el consumidor las virtudes de sus productos, el resultado es casi siempre un híbrido, combinación de la habilidad gráfica y la audacia. Al cabo de ocho años de coleccionar imágenes, sumando la colaboración de varios fotógrafos y amigos en el 2001 y como extensión natural del libro, decidimos hacer una exposición. Al sobredimensionar estas imágenes e instalarlas en el ámbito de un museo el efecto inmediato es que se convierten en obras de arte. La gruesa línea que separa la cultura popular del arte contemporáneo, argumento ya postulado por el movimiento Pop Art en los años sesenta, se estrecha. " -- P. Web editorial

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NUEVOSESTUDIAN